miércoles, 20 de marzo de 2013

Lavarse el pelo cada día


"Lavarse el pelo cada día no es recomendable" ¿cuántas veces lo hemos oído?
Al lavarlo estamos quitando la capa natural de sebo natural que nuestro cuero cabelludo fabrica para mantener la piel hidratada y protegida.

¿Por qué nos lo lavamos a diario?

Quizás identificando la causa podemos encontrar el remedio.

Se me ocurren varias razones:
  • Hacemos ejercicio cada día y sudamos. Está claro que no es "bonito" ir con el pelo sudado por el mundo, más que nada porque eso al cabo un ratillo puede generar olores indeseados...
  • Tenemos el cuero cabelludo graso, por lo tanto se nos engrasa la raíz. A la gente con el pelo corto se le puede notar más que el pelo está grasiento, porque se le apelmaza, le pesa más, se le aplasta y pierde volumen.
  • Se nos ensucia por causas externas, como por el ejemplo: la contaminación (si vivimos en una gran ciudad), por nuestro trabajo, por causas ambientales como por ejemplo la sal de la playa o el cloro de la piscina o si vivimos en una zona con mucho aire (el viento arrastra todo lo que encuentra a su paso y lo deposita en otros lugares, si habéis ido a clase de ciencias naturales sabréis de qué estoy hablando...)
  • Si utilizamos productos de para fijar el peinado, como son la laca, la gomina, espuma, etc.
  • Nos lo tocamos mucho con las manos.
    Hay gente que tiene la manía, el vicio o como queráis llamarlo de tocarse constantemente el pelo (ahí me incluyo ... U_U ).
    A lo largo del día nuestras manos pasan y tocan variedad de cosas, limpias, no tan limpias o limpias a simple vista.
    Acumulamos muchas cositas microscópicas en nuestras manos y si éstas las pasamos por nuestro cabello, iremos dejando estas cositas por nuestro pelo.
    Además, en las palmas de las manos tenemos glándulas sebáceas que van fabricando sebo que también depositamos en el pelo si lo tocamos.
  • Utilizar champús que no son adecuados a nuestro tipo de cabello. Tenemos que saber qué tipo de cabello tenemos y comprar productos acordes, que para eso existen!
    Es lógico, ¿no? Si tenemos el pelo graso, no nos va a ir bien un champú que tenga de 3 a 15 tipos de aceites para hidratar nuestro pelo y que está indicado para cabello seco...
  • Utilizar productos con siliconas. ¡Ahí estamos! El querido tema de las siliconas...
    Se supone que las siliconas se van fijando a nuestra fibra capilar para ir recubriéndolo y darle la apariencia de sano y brillante. Como si pasáramos una capa de barniz a una puerta...
    Si el champú que nos estamos aplicando contiene siliconas, también lo estaremos aplicando en la raíz y nuestro cuero cabelludo. Con el tiempo, todo eso se va acumulando y nuestro pelo cada vez tendrá más residuos y por lo tanto se nos ensuciará antes.
  • El pez que se muerde la cola. Como al lavarnos el pelo retiramos la grasa o sebo de nuestro cuero cabelludo, nuestro cuerpo fabrica más sebo para contrarrestar esta falta. Si fabrica más sebo se nos engrasa el pelo otra vez, por lo tanto lo volveremos a lavar. Y vuelta a empezar... Al final se convierte en una dependencia.
Otras causas que alomejor pasan más desapercibidas son los elementos u objetos que tocan nuestra cabeza a lo largo del día. Es el caso de las almohadas y los cepillos para peinarnos. Una buena higiene de estos elementos, nos ayudará a mantener el pelo limpio algo más de tiempo.
Si ponemos en nuestra cabeza cosas que no están limpias, no ayuda.

Entonces,

¿Qué hacemos si , por narices, tenemos que lavarnos el pelo a diario?
Primero: detectar cual es la causa.
Segundo: tomar medidas y actuar en consecuencia.

Si nuestro problema viene porque tenemos el pelo graso y no nos sentimos cómodos si no nos lavamos el pelo cada día, puede ser que no estemos utilizando el producto adecuado para nosotros.

Si no sabemos qué tipo de cabello es el nuestro podemos acudir a un profesional, ya sea el dermatólogo o nuestra peluquera de confianza. Ellos nos ayudarán a identificarlo y nos podrán recomendar los productos que más nos van a ayudar.

Otra opción, más radical y más difícil de poner en práctica , es intentar espaciar los lavados. Deberíamos intentar, simplemente, no lavarnos el pelo cada día. De esta manera, no estamos obligando a nuestro cuero cabelludo a fabricar más grasa, porque no se la estamos quitando. Con el tiempo se debería normalizar.
Y evidentemente, una cosa que queda totalmente prohibida es tocarse el pelo. :(

¿Y si tenemos que lavarlo sí o sí y no podemos ir con el pelo hecho un asquete? Pues una buena idea quizás sería utilizar champús de uso frecuente o para niños. Para la niños??? sí ;) 
Este tipo de champú normalmente son  más suaves, no contienen gran cantidad de sulfatos o contienen pero son menos agresivos. De esta manera, estaremos limpiando el pelo pero no dejaremos nuestro cuero cabelludo "pelado" sin grasa.
Lo mismo pasaría si nos decantamos por hacer una rutina de co-wash (lavarse con acondicionador). Podríamos lavarnos el pelo de una manera suave...cada día.

viernes, 15 de marzo de 2013

El aliado de mi piel: Aloe vera

Un elemento de cuidado personal que no puede faltar en mi baño es el aloe vera.
Es una planta archiconocidísima en el mundo de la cosmética y cuidado personal.

Por si alguien no la conoce todavía el aloe vera o sábila es una planta con hojas gruesas, carnosas, de color verde "a lo cactus de agua". Se cultiva para usos medicinales, ya que de sus hojas se obtiene un gel con importantes propiedades beneficiosas para la piel. No sólo se utiliza de manera tópica, también se comercializan jugos y tratamientos naturales a base de aloe vera.

Yo conocí el aloe hace ya muchos años cuando tuve una época un poco mala de granitos en la cara. Yo no he sufrido el problema del acné pero en aquella ocasión por lo que fuera mi piel tuvo un pequeño brote de granitos bastante molesto.

Fui al dermatólogo, pero el tratamiento que me recetó no me hizo mucho efecto y como no quería que me inchara de pastillas, empecé a buscar información por mi cuenta sobre tratamientos naturales (ojo! con lo que buscáis, no todo lo que se encuentra en internet sirve para todo el mundo).

Para reforzar lo que encontré por internet me dirigí a una herboristería de mi barrio para que me asesoraran al respecto.
El caso es que me acabé comprando un gel a base de aloe vera y aceite de árbol de té que me ayudó muchísimo.

La combinación de estos dos elementos es ideal para las pieles con problemas de granitos. El aceite de árbol de té está indicado principalmente para este problema, ya que tiene propiedades antisépticas, antiinflamatorias, cicatrizantes y regula la actividad de las glándulas sebáceas.
¡Ideal de la muerte!¿no?

Por su parte, el aloe vera no se queda corto tampoco... tiene propiedades muy interesantes también, si se usa externamente para la piel: es un potente regenerador celular, cicatrizante, astringente, alivia y calma la piel, favorece la síntesis de colágeno.
También actúa beneficiosamente de manera interna. Yo estuve tomando unas grageas naturales a base de aloe que me ayudaban a regular de manera natural mi tránsito intestinal.

Actualmente, siempre tengo un bote de gel de aloe vera 100% natural por casa. Se puede encontrar fácilmente en farmacias, herboristerías e incluso en supermercados.

Aparte tengo una maceta con la planta en la terraza y cuando lo necesito le corto una hoja (de las maduras si puede ser, tiene más propiedades) y me aplico directamente el moco gelatinoso que tiene en su interior.
Los usos que yo le doy son:

  • Aliviar la piel después de tomar el sol.
  • Para las quemaduras (ya sean solares o no)
  • Después de la depilación.
  • Para calmar la piel después de una exfoliación.
  • Para regular la grasa de la cara, antes de la hidratante.

martes, 12 de marzo de 2013

¿Exfoliación facial? ¡Sí!

Siempre he leído que se recomienda exfoliar la piel del rostro una vez a la semana o una vez cada X días. Dependiendo de nuestro tipo de piel y el tamaño de los gránulos para realizar la exfoliación.
Podemos decantarnos por comprar cualquiera de los productos que existen en el mercado (que son un montón) o podemos fabricarnos el nuestro en casa.

Yo he hecho las dos cosas. La verdad es que no he comprado muchos productos de este estilo en mi vida. Me he decantado más por fabricármelo yo misma.

Por ejemplo, un ungüento exfoliante muy fácil de hacer en casa es mezclar:
sal y aceite (de almendras o de oliva nos serviría)
La sal es la que nos haría la función de exfoliar y el aceite no ayudaría a extender la mezcla, hidratar y cuidar la piel.

Hay que tener en cuenta que algunas mezclas exfoliantes pueden ser muy agresivas, ya que podrían rascar demasiado e irritar la piel. Así que, es recomendable buscar una receta que esté indicada para nuestro tipo de piel, ya sea sensible, grasa, mixta, etc. Es sólo buscar durante un par de minutos más :P
Respecto a la frecuencia de aplicación, yo no voy con el calendario a cuestas... simplemente me fijo un poco en lo que mi piel me transmite.

Mi "truco" para saber si necesito realizar este tratamiento es pasarme la yema de los dedos sobre la piel del tabique nasal. Si no noto la piel lisa y se notan los "poritos" pues entonces sé que debo hacerme una exfoliación. Es bastante notorio el cambio del antes y el después... la piel queda muy lisa y suave por esa zona.

Actualmente, utilizo un producto que me compré este verano a base de sales del mar muerto y mezcla de aceites. Lo utilizo como exfoliante corporal en la ducha y también como facial.
Rasca bastante, así que para aplicármelo en la cara me humedezco bastante la piel. De esta manera los gránulos de sal se disuelven un poco y no parece que te estés pasando el papel de lija por el careto...

Los pasos que realizo exactamente en todo este ritual son:

  1. Limpiar con un gel limpiador o jabón. El que utilizo actualmente es un gel limpiador de mercadona que lleva ácido salicílico. El ácido salicílico funciona como peeling químico y ayuda a la prevención de espinillas y acné.
  2. Enjuago el jabón y con la cara húmeda aplico la mezcla exfoliante. Realizo movimientos circulares, sin apretar. Insisto en zonas como la nariz, la frente y la barbilla.
  3. Retiro con agua tibia y aplico un tónico calmante o para piel sensible.
  4. Aplico gel de aloe vera hasta que se absorba completamente.
  5. Y por último me aplico mi contorno de ojos y mi crema hidratante o nutritiva. En estas ocasiones intento utilizar una crema hidratante algo más "potente" que la que utilizo normalmente ya que al limpiar y despejar los poros lo que apliquemos posteriormente se absorberá mucho mejor (aparte que nuestra piel en ese momento estará pidiendo a gritos consuelo).

He de decir que este tipo de tratamiento se debería hacer de noche o cuando ya  no vayamos a exponernos a luz solar, ya que estamos "irritando" la piel y quitándole las posibles células muertas que tenga en la superfície dejándola desprotegida. Por eso es importante aplicarnos después productos que nos ayuden a calmar y regenerar la piel.

viernes, 8 de marzo de 2013

Co-wash



Siguiendo con el tema del cuidado capilar y los sulfatos en los champús, vamos a hablar del co-wash.
El co-wash es como se le llama a "el lavado con acondicionador" (conditioner-washing) (sí, sí...lavarse el pelo con acondicionador).
Es una técnica o rutina para la limpieza y cuidado del cabello en la que se elimina el uso de champús (que contienen los dichosos sulfatos de los que todo el mundo habla) y se utilizan los acondicionadores ya que también tienen agentes limpiadores en no tan agresivos.
Los sulfatos en los champús son los componentes que limpian y crean espuma al contacto con el agua. El uso continuado de este tipo de productos puede resecar en exceso el cuero cabelludo y debilitar el cabello, ya que, además de limpiar el pelo, elimina la grasa natural de nuestra piel. Es por eso que "no se recomienda" su uso frecuente, ni lavarse el pelo todos los días.

Por lo que he  leído, este método lo utilizan sobre todo las personas con pelo rizado o afro (me ha sorprendido lo mucho que se cuidan el pelo la gente con el pelo afro), la mayoría de posts que he encontrado sobre este tema son de blogs de este estilo.
También lo utilizan personas con el pelo muy seco, dañado o con tinte.
Yo lo recomendaría también a la gente que se tiene que lavar el pelo casi diariamente, como es la gente que hace ejercicio. Siguiendo la rutina de co-wash evitaría lavarse el pelo cada día con un champú con sulfatos.

Pero ¡cuidado! no todos los acondicionadores sirven para este cometido. Para empezar, el acondicionador tiene que estar libre de siliconas y lo ideal es que no sea un acondicionador demasiado hidratante o pesado, ya que sinó engrasaría demasiado el cuero cabelludo.

Buscando por internet se pueden encontrar foros y blogs dónde recomiendan algunas marcas. La mayoría de sitios que yo he encontrado y que se trata este tema son comunidades afro-americanas o afro-latinas dónde se habla de marcas que no se encuentran en España (o eso creo).
Aunque buscando un poco más intensamente, al final encontré productos que sí tengo alcance de super :)
Yo realizo co-wash de vez en cuando, no es una técnica que utilice siempre, porque mi pelo no es ni rizado, ni seco ni con tinte. Pero si echo mano de ello cuando, por narices, me tengo que lavar el pelo y no lo tengo demasiando "sucio" como para tener que lavarlo con champú (por ejemplo, si voy al gimnasio, piscina,etc).

El acondicionador que me ha servido para esto es el Herbatural crema suavizante con aceite de almendras dulces.

Este tipo de acondicionador tiene la ventaja de que trae bastante cantidad (importante, porque se gasta mucho producto con esta técnica), no tiene siliconas y contiene entre sus ingredientes limón que nos ayuda a limpiar el cabello.

Lavado:  hay que mojarse muy bien el pelo con agua templada (si está un poco caliente nos ayudará a limpiar mejor) y frotar enérgicamente con la yema de los dedos (enérgicamente, no a lo bruto...). Después aclarar muy, muy bien.

Pegas: se gasta mucho producto porque al no hacer espuma no se reparte tan bien por la cabeza (os recomiendo encontrar una marca que traiga bastante cantidad y sea económica). Y se gasta también bastante agua para el aclarado porque si no retiramos muy bien el producto nos puede dejar sensación grasa.

martes, 5 de marzo de 2013

Miss aceites


Otra de mis pasiones son los aceites para cuerpo o cabello. Empiezo a tener la colección entera...que si el de coco, que si el de almendras dulces, argán, rosa mosqueta....
Por supuesto, intento comprarlos puros, 100% naturales y así me sirven para todo (rostro, cabello y cuerpo).
Me encanta el de almendras para después de la ducha y como mascarilla para el pelo. El de argán me gusta para el rostro, a modo de sérum por las noches. El de rosa mosqueta lo uso cuando me depilo por ejemplo, mezclo unas gotas de este aceite con una cucharada de gel de aloe vera. Y el de coco es un multiusos.

En lo que se refiere al cuerpo, soy muy asidua también a las cremas corporales pero en según que ocasión los aceites me parecen más prácticos.
Va a temporadas, normalmente utilizo más los aceites en la ducha en verano. Me gusta el mucho el aspecto que le da a la piel (en verano enseñas más) y así no tienes que andar echándote la crema con el calor que hace, empiezas a sudar y te quedas como para meterte otra vez en la ducha...
También me resultan más prácticos para llevar al gimnasio. Después del ejercicio te metes a ducharte, te aplicas el aceite, te secas y ale! a vestirte.

Uno de los aceites que tengo muchas ganas de probar es el famoso aceite de monoï o aceite de tiaré. Dicen que tiene un olor estupendo y muy duradero. Tengo pendiente pasar por un Yves Rocher a probarlo y a ver si me decido a comprarlo ;)

domingo, 3 de marzo de 2013

Pon una planta en tu vida


Estas últimas semanas me estoy introduciendo el mundillo de las plantas en el hogar (aromáticas, decorativas, cosmetibles...). Yo que soy un puro desastre para cuidar de las plantas...que se me olvida regarlas y esas cosas. Es una de mis tareas pendientes en el hogar...

Fui hace unos días a un Lidl que tengo cerca y estuve trasteando en la sección de jardinería que esa semana estaba de oferta y tenían variedad de semillas, bulbos, etc (si no conocéis los supermercados Lidl sabed que cada dos o tres días traen cositas de oferta para el hogar, bricolaje, jardin, ropa, etc.).
Compré dos semilleros, uno con semillas de tomate y el otro con semillas de Viola tricolor bambini (en la foto del exterior se parecía al Pensamiento) y unos bulbos de flores de Aquilegia.
El caso es que lo he plantado todo siguiendo las instrucciones y con mucha ilusión, esperando que germine todo correctamente y poder ver el fruto. Quina emoció!

viernes, 1 de marzo de 2013

Natural, como la vida misma


Últimamente estoy más concienciada de que lo natural es mucho mejor para nuestra salud (¡vaya tú que cosa!...).
Bueno, convencida de ello ya lo estaba, es sólo que ahora estoy empezando a ponerlo en práctica.
Será la edad... U_U'

La verdad es que yo siempre me he auto denominado "la friki de las hierbas" por la cantidad de infusiones y tés que, hace ya unos añitos, ocupa un lugar muy importante en mi despensa. También soy un poco" loca de los aromas", con mis cargamentos de inciensos y esencias para quemador ^^
Además, ¿quién no ha hecho alguna vez algún "potingue" que ha visto en youtube y se lo ha echado en la cara o el pelo?? :-P

Hace unos meses que me he unido al club de "no siliconas", "no sulfatos" y "no todo" que tan de moda se ha puesto en el mundillo de youtube y foros sobre cosmética y belleza.
La verdad es que ya no compro nada sin leer antes los ingredientes de los que se compone. Es una odisea encontrar un producto que cumpla estos requisitos y te vuelves lela mirando y leyendo las letrujas de cada bote de champú que te encuentras en el súper.

Pero bueno, buscando y leyendo por internet al final das con muchas reviews interesantes que te ayudan en la árdua tarea de "en busca del champú perfecto".
Además poco a poco cada vez son más las marcas comerciales que se están poniendo las pilas en este tema y que lo indican en su packaging.